Ciencia recreativa: bacterias
Martes, 14 de febrero de 2006
La ciencia recreativa tiene varias variantes de interés. La principal es la variante educativa: se organiza un «museo de la ciencia» y se colocan carísimas cabinas a prueba de vándalos en las que la gente se aburre, en lugar de ver a vándalos haciendo el animal gracias a la ciencia, que es una actividad con la que te lo pasas el doble de bien y además aprendes el triple. Es inolvidable el momento en el que el sodio explota al entrar en contacto con el agua, por poner un ejemplo.
Otra variante es el tradicional proyecto de estudiante. En general, los proyectos escolares son un recorrido en el que se estudian procesos que ya han sido estudiados y analizados en textos científicos anteriores. Esto ayuda a la hora de construir el experimento -ya bsucando resultados determinados desde el principio, como en el mundo científico real, atrapado en la necesidad de mantener al subvención- y a la hora de corregirlo. Pocas veces un estudio infantil es relevante, desde los tiempos en los que a Gauss, tal vez el matemático más grande de la historia, le impusieron como castigo que sumara todos los números enteros del 1 al 100: en lugar de sumarlos a brazo, el campeón formuló, allí, en clase, de crío, una ecuación que permitía sumar series. Lo mismo del 1 al 100, que del 1 al 100000000.
Pero hay una variante extra: el trabajo de estudiante que mira un tema en el que no se ha fijado nadie y obtiene unos resultados no relevantes -como el monstruoso ejemplo del Gauss escolar- pero sí sorprendentes, con lo que no solo se recrea el alumno sino el resto del universo. En el caso que nos ocupa, más que recrear lo que hace es inquietar.
Una niña de 12 años se dedicó, en los restaurantes de Florida a los que le acompañó su padre, a comparar el agua de los cubitos de hielo de las bebidas con el agua del retrete. Los resultados: en tres de cada cuatro casos, el hielo de la bebida tenía más bacterias que el agua del baño.
Esto es ciencia recreativa. Alejen el combinado de sus labios muy despacio.