El símbolo de los ingenieros industriales es el regulador de watt, una maravilla de la mecánica que auto regula su funcionamiento. Al aumentar la velocidad, los brazos se elevan, lo que tiende a frenar la pieza. En consecuencia, el sistema tiende a mantenerse estable.

Me ha recordado mucho al regulador de Watt esta espectacular invención: una máquina para ayudar a los niños a salir en los partos, aprovechando la fuerza centrífuga. Vean:

La patente está aquí

Mi cerebro no ha podido evitar vincular ambas imágenes.

Eviten comentarlo con su colegio de ingenieros más cercano. Muchas gracias.