RanXerox y las revelaciones que llegan tarde
Martes, 15 de enero de 2008
Por alguna extraña razón, guardé para siempre una escena del tebeo «RanXerox en Nueva York». RanXerox en aquella época era de lo más comentado que se publicaba en la revista el Víbora. Este tebeo ultraviolento protagonizado por un cyborg musculado, escrito por Tamburini y magistralmente dibujado por Tanino Liberatore, ha quedado marcado en la mente de mucha gente. Al parecer, nada menos que Chris Cunningham ha movido ficha para llevarlo a la gran pantalla.
La escena en cuestión era tan tonta como esto: Ranxerox pasea por un barrio marginal de nueva york en el que un radiocassette (que los alemanes describen mucho mejor con su término guettoblaster) reproduce a todo volumen una canción del grupo Joy Division. Ranx se pone a bailar, y la banda local se pone a golpearle porque, atentos, «Joy Division no se baila».
Con la cantidad de cosas interesantes que he olvidado en la vida, llama la atención acordarse de semejante tontería, ¿verdad?
Pues el otro día estaba repasando listas ajenas con «las mejores canciones de 2007» (que es una cosa que me gusta hacer cada cambio de año), y me quedé clavado cuando escuché en el estribillo de una:
«He vuelto a Liverpool
y todo parece igual
pero se me ocurrió algo anoche
que me cambió la forma de pensar
un pequeño consejo que ha tardado 22 años en formularse
os lo revelo a continuación
aprended de mis errores:
Bailemos al ritmo de Joy Division
y celebremos la ironía
todo está yendo a peor
pero somos felices
Bailemos al ritmo de Joy Division
levantemos nuestra copa
todo está yendo a peor
pero somos felices»La canción de los Wombats es un temazo BritPop que suelta como gran revelación lo que el tebeo italiano ya había dicho más de veinte años antes. Huelga decir que el italiano quería bailar, y los ingleses, pegarle. Supongo que el término operativo aquí es ironía, que es algo que solo subrayan quienes no lo tienen con frecuencia, del mismo modo que se señala mucho más la nieve en los lugares donde no suele caer.La cuestión es que esta canción no sólo no me ha resuelto el principal misterio (¿por qué el «bailar al ritmo de Joy Division» se me ha quedado en la mente más de veinte años?) sino que ha añadido un misterio más: ¿Cómo puede funcionar el mismo chiste friqui dos décadas despues?
Bola Extra: Igual que he tenido en bucle el tema de arriba unos cuantos días, confieso aquí abajo otro bucle de muchas repeticiones: Yeah Yeah de BodyRox.
El video de BodyRox, vía llamame lola