Aquí tienen el pasillo de baile del programa Soul Train (1974),

Pinta a que fue el germen de lo que luego sería «La juventud baila», del programa español «Aplauso» (1980).

Con, ajem, todas las diferencias.

Bola extra: noten el precedente hiphopero del minuto 1:40 del primer video. Ese movimiento se convertiría en el clásico de arranque en la época de Beat Street (1984).

«Este espacio contiene subliminales, y usa frecuencias fuera del rango audible por el oído humano. Si en la actualidad se medican con neurolépticos o recuperadores de dopamina, su audición está desaconsejada.»

Aquí.

«¿Sabes lo que me gusta un montón?», pregunta de repente Michael [Jackson]. «Los maniquíes». Sí, se refiere a esos que ves semidesnudos en los escaparates. Según me cuenta, cuando su casa nueva esté acabada, tendrá una habitación sin muebles, sólo un mostrador y un montón de maniquíes almacenados.

«Supongo que fantaseo con la idea de que cobren vida. Me gusta imaginarme hablando con ellos. ¿Sabes por qué? Creo que es mi manera de tener compañía, de estar rodeado de amigos que nunca he tenido. Creo que tengo dos amigos, como mucho. Dedicándome al espectáculo, es difícil saber quiénes son tus amigos. Todos te ven de un modo diferente, como una estrella, nunca como un tipo normal».

Se detiene y se fija en las estatuas de la habitación. «Eso es. Me rodeo de gente que quieren ser mis amigos. Y eso lo puedo hacer con maniquíes. Hablaré con ellos».

G. Hershey entrevista a Michael Jackson
en 1982, recién publicado Thriller.

 

Extraido del número de agosto de 2009
de la edición española de la revista Rolling Stone

Razón: aquí.

Albricias!

1963– Revista Mad, num 81: La rebelión de los electrodomésticos

1982– Alaska y Pegamoides: La rebelión de los electrodomésticos

Igual lo prefieren con buen sonido.

Cuando he empezado a leer esta lista en el blog de El Teleoperador, creía que eran frases sacadas de películas españolas, una cosa directamente de humor.

Pero no, las frases son reales, y todas salen de la misma «Consuelo, periodista»:

Te pega con los vaqueros, con la ropa de calle, con la de vestir, con todo… Si te fijas, el abrigo de visón es lo que más te pones. (febrero 96)

Es curioso que mi cumpleaños siempre coincida con el santo de Julio Iglesias. (abril 96)

Antonio, ¿qué diferencia hay para un hombre entre estar enamorado y estar encoñado? Porque para una mujer no hay ninguna… (07/05/96)

Déjame en paz, te lo juro. (08/05/96)

A las cuatro y media no, mejor quedamos a las cinco menos cuarto porque tengo completamente olvidada mi vida privada. (13/05/96)

Imagínate que somos novios y que yo te tengo puestas las piernas así, alrededor del cuello… (al redactor jefe, 14/05/96)

Queridos, os veo un poco así, un poco ancestrales. ¡Yo sigo siendo la única que tiene un teléfono móvil! (a los compañeros de la redacción, 03/06/96)

La cobertura es como un paquete de Marlboro, ¿sabes? Te fumas un cigarro, te fumas otro y cuando se te acaba el paquete ya no tienes cobertura. (09/08/96)

Si el Príncipe se casa con Tatiana de Linchestein me meto monja. Porque una vez comprobado lo absurdo de la vida, entre suicidarme y meterme monja, pues claro, monja. O mejor a una ONG, como Isabel Sartorius, ¿no? (14/10/96)

¿Pero cómo le va a haber dado un infarto, con lo bien que me caía? (05/06/96)

 Sigan leyendo, porque se mantiene cumbre…

Laurita Valenzuela nos canta un clásico de la picardía veraniega:

Un yo, tubo

[Mientras] Europa, a través de la voz de los intelectuales, celebraba el reencuentro consigo misma, (…) los protagonistas del combate [de los balcanes] parecían tomar la historia en un sentido prohibido, sobre todo los eslovenos y los croatas, que pretendían salir del comunismo y entrar en Europa por la vía del nacionalismo.

Querían erigir fronteras en el preciso momento en que nosotros las abolíamos. Practicaban el separatismo cuando nosotros hacíamos de la caída del Muro de Berlín el símbolo y el paradigma de la lucha contra todas las formas de exclusión. Hacían surgir arrugas en el rostro de un continente que se entusiasmaba por rejuvenecer al borrar los rastros de su pasado tenebroso y pendenciero.

En suma, en el momento de la gran mezcla de identidades, no encontraban nada mejor que segregarse.

Alain Finkielkraut, Los latidos del mundo, pag 11

Este extracto, que saco a colación por el titular del día, retrata simultáneamente el lado trágico y el festivo del apparat nacionalista: en las fiestas organizadas al calor de organizaciones separatistas, verán que siempre hay alguna banda que se proclama como representante del mestizaje. Tal y como enuncia Finkielkraut, es como si en las fiestas del Klan las orquestas se autoproclamaran portavoz de la Motown.

Esta paradoja es la prueba del algodón del convencimiento nacionalista: si encuentran una persona que celebra la mezcla mediante la acotación, sabrán que está embebido en un dogma del que no te saca la lógica.

En anteriores capítulos….

Eli Gras me regaló, a la salida del segundo Trash entre Amigos, un set de Tele-Comics dibujados por Jan, el autor de SuperLópez. En el bar postfiesta celebramos cada barrido de los dibujos, sobre todo el cambio de perspectiva en el de Balonvolea. Con la donación, ya sólo me faltan cuatro para tener la colección completa. Aquí los pueden ver todos animados:

Este es el informe Repronto de cuya emisión avisé hace algunos días. Es parte del programa La Malla, de la Red Catalana de Televisiones locales.

Original aquí.