Ya saben que en este blog somos muy fans de los ferrofluidos: líquidos que se polarizan en un campo magnético; sopas que bajo la acción magnética toman formas inesperadas y bellas.
De los numerosos experimentos con ferrofluidos que muestra youtube, me ha sorprendido el que les presento abajo. Una mancaha de liquido en una matriz con un campo magnético giratorio. La segunda mitad del video, muestra la masa líquida disgregándose en una malla casi regular, más cerana al dibujo manual que a una perfecta separación de líneas magnéticas.
En particular, el instante 2:11 me ha hecho preguntarme: ¿tienen que ver las formas de las circunvoluciones del cerebro con la polarización? El parecido es casual pero inquietante…
Los simuladores médicos en principio parecen una buena idea: fabricas unos muñecos para que los estudiantes de medicina vayan practicando antes de actuar sobre una persona de verdad.
Pero la cosa se dispara cuando uno comienza a ver las extrañas variantes de esta especialidad, y piensa aplicaciones fuera de la formación en medicina.
Ahora que el mundo empresarial subraya a los empleados móviles y las empresas flexibles, sólo nos cabe admirar la polivalencia de esta empresa que se anuncia mediante el ultramoderno marketing de guerrilla. Atentos a las especialidades.
Un nicho de mercado prácticamente desierto
A subrayar la versión china de Baby Einstein. Supongo que sustituye a Bach y a Mozart por melodías de restaurante y pitidos de regalo de todo a cien. Luego salen como salen y necesitan un foniatra.
A todos nos suena la frase «no se debe juzgar un libro por la portada». Pero esa misma filosofía se puede llevar a otros medios. Y no tanto el «no dejarse engañar», sino el darse cuenta de que la portada puede ser tan representativa de la obra que puede sustituirla.
Como ejemplo, vean esta notable selección de créditos de cine que recoge, en opinión de los holandeses Mark Klaverstijn y Roel Wouters, las 25 piezas más relevantes de esta especialidad del séptimo arte. No están todos los que son, pero son todos los que están. Particularmente -viva aquí el chovinismo- el sobresaliente representante holandés. Son dos vídeos:
Bola extra: no está en la selección porque no ha influido a los audiovisuales de su época tanto como las piezas mostradas arriba, pero estos créditos de la película Dead Man on Campus unen simplicidad y efectividad con la solvencia del maestro Kyle Cooper (autor de los créditos de Se7en, que sí dieron un vuelco al grafismo de aquel momento). No he podido olvidarlos desde que los ví.
En principio, deja claro que no quiere que pase nadie. Entiende que puede haber causas de fuerza mayor, y que, pese al aviso, haya personas que procedan a entrar. En tal caso, la norma es estricta: «Admito casi todo, menos familia».
Hay mucha experiencia tras estas paredes. Aprendamos de ella.
Ayer me acostaba leyendo el arranque de «La Rebelión de las masas» de Ortega y Gasset, y me encontré con este párrafo:
«Por esto recomiendo al lector que ahorre la malignidad de una sonrisa al encontrar que en los últimos capítulos de este volumen se hace con cierto denuedo, frente al cariz opuesto de las apariencias actuales, la afirmación de una pasión, de una probable unidad estatal de Europa. (…). Ha sido el realismo histórico el que me ha enseñado a ver que la unidad de Europa como sociedad no es un «ideal», sino un hecho y de muy vieja cotidianidad. Ahora bien: una vez que se ha visto esto, la probabilidad de un Estado general europeo se impone necesariamente. La ocasión que lleve súbitamente a término el proceso puede ser cualquiera: por ejemplo, la coleta de un chino que asome por los Urales o bien una sacudida del gran magma islámico.«
Esos temas tan modernos, con los chinos apuntando maneras y el mundo islámico en permanente ebullición, y el conflicto pero unión de los gobiernos europeos,… vaya, que no son tan modernos. Don José escribía estas líneas en 1937.
Bola extra: Hay muchos párrafos de su «introducción para los Franceses» que tienen extractos que siguen de plena actualidad hoy, hablando de los snobs, los enteraos, los modernos y los que no salen de su tele y de su playstation. Ortega era un maestro y procuraremos poner de cuando en cuando perlitas sueltas. Los completistas, pueden leer «la Rebelión de las masas» aquí.
Bola extra: yo he visto videos de sus inventarios pero en youtube no hay nada. El visionado les aumentaría el asombro sin duda. Avisenme si encuentran alguno.
Los japoneses están muy puestos en el uso humano con fines gastronómicos. Tradicionalmente, hemos conocido el «Nyotaimori”, consistente en servir (y comer) la comida sobre una persona viva y desnuda. También lo han usado como método de decantación, y beber «sake con algas» consiste en beber el licor según cae por la entrepierna de la señorita-decantador. LA partícula «con algas» hace ver que la depilación no es bienvenida en estas prácticas.
Guardando la base han dado un paso más. Inspirados en los muñecos que sirven para practicar operaciones y autopsias (un campo fascinante sobre el que ya escribí un artículo en la revista Mondo Brutto), han decidido hacer un cuerpo humano de comida. Un cuerpo que sangra al cortarlo y del que se come todo menos los huesos. Particularmente, el meollo está en las tripas, si me permiten la redundancia. Canibalismo de postín. O, poniéndonos cinéfilos, Mondo Gourmet. Curiosamente, el restaurante no se llama Lecter. Pero creo que el célebre connoiseur comehombres tiene mucha culpa.
Bola extra: supongo que saben, según testimonio de los supervivientes de «viven», que el cuerpo humano sabe a pollo. Una decepción para los cazadores de texturas.
unos gazapos para ilustrar. Pulsen para ampliar y leer.
Uno de mis recortes favoritos está sacado del notable libro «Antología de gazapos»(Ed Planeta, 1988), de Eduardo Ruiz de Velasco. Los gazapos son errores tipográficos o lingüísticos que dan lugar a confusiones divertidas.
Mi recorte favorito es notable porque quizás es la única pieza de todo el libro que no es un gazapo. Dice así:
Ecos de Sociedad: «Doña Encarna Gamos, esposa de nuestro colaborador Federico Laca, ha dado a luz un hermoso niño al que se impondrá el nombre de Felipe.»
Ahora, reconstruyan el nombre completo de la criatura.
La revolución de boquilla, puesta en evidencia en esta historieta que descontextualiza un cómic original del maestro Jack Kirby, modificando los diálogos.
La conjura de los necios, reformulada en un artefacto pop telegráfico.